La carga inalámbrica ha brindado una serie de facilidades para las personas que utilizan algunos dispositivos tecnológicos con cierta frecuencia. No es de extrañar: cargar aparatos electrónicos sin necesidad de tener un cable conectado a un tomacorriente es una gran ventaja.
Con el avance de las tecnologías en las más diversas áreas, era natural que en algún momento se dejara de lado el cable a la hora de cargar dispositivos. Y es que ya estamos viviendo esa era de la carga inalámbrica .
Probablemente ya hayas entrado en contacto con la tecnología de carga inalámbrica , principalmente relacionada con la carga de smartphones. Para aquellos que usan su celular por muchas horas y necesitan que esté siempre cargado, la tecnología de carga inalámbrica es la solución.
Sin embargo, las aplicaciones de la tecnología de carga inalámbrica son muchas y se extienden más allá de los teléfonos móviles, trayendo beneficios a otros sectores que son importantes para la vida de miles de personas.
En este artículo conocerás las nuevas tecnologías de carga inalámbrica y sus aplicaciones en la vida cotidiana, así como comprenderás el uso práctico de cada una de ellas. Esperamos que el contenido sea útil y que la lectura sea amena.
El comienzo de la tecnología de carga inalámbrica
Comencemos abordando el tema explicando un poco sobre el surgimiento de la tecnología de carga inalámbrica.
La idea de transmitir energía por inducción surgió a finales del siglo XIX, cuando al inventor Nikola Tesla se le ocurrió el concepto de intercambiar energía por inducción.
Para resumir, la teoría de Tesla decía que esto era posible con un resonante magnético que entregaría energía a través del aire con un transmisor y un receptor para esta energía liberada.
Pasó el tiempo y la transmisión de energía por inducción quedó solo en el campo de las ideas, sin ningún ejemplo práctico que fuera beneficioso para la vida de las personas.
Sin embargo, los avances tecnológicos han revolucionado la forma en que se puede utilizar la electrónica y han aprovechado la oportunidad para realizar aplicaciones con energía de inducción que podrían contribuir positivamente a la vida de las personas en todo el mundo.
Tecnologías de carga inalámbrica y cómo aplicarlas
Cargar la batería de un dispositivo electrónico sin necesidad de un cable para alimentarlo es la razón de ser de la carga inalámbrica.
Básicamente, la tecnología de carga inalámbrica funciona a través de una estación de carga que contiene bobinas de inducción envueltas en alambre de cobre.
Se crea un campo magnético y es capaz de transmitir energía a través del aire a un dispositivo electrónico, como un teléfono celular. Solo es necesario que la electrónica esté cerca de las bobinas de inducción para que la batería se cargue de energía.
Por supuesto, la estación de carga debe estar enchufada durante un cierto período de tiempo para una transmisión de energía efectiva y completa.
También es posible que esta estación de carga se use desenchufada, pero la carga estará limitada por el tiempo que la bobina puede transmitir energía sin estar conectada a una fuente de energía.
Otro detalle importante de la carga inalámbrica es que está involucrada con muchos dispositivos electrónicos, de los cuales podemos destacar aquellos con los que tenemos más contacto en el día a día:
- Teléfono móvil;
- Audífono;
- Reloj inteligente;
- Tableta;
- Caja de sonido.
Aparatos como los mencionados anteriormente forman parte de nuestra vida y es prácticamente imposible pensar en una rutina sin ellos, ¿no?
Así como es difícil adaptarse a la carga por cable de estos dispositivos después de haberlos cargado ya de forma inalámbrica.
Consulte también este artículo para complementar su lectura: Las nuevas tecnologías de carga inalámbrica y sus aplicaciones
¿Y hacia dónde irá la tecnología de carga inalámbrica en los próximos años?
Las aplicaciones de la tecnología de carga inalámbrica se están desarrollando cada vez más para facilitar el uso de dispositivos electrónicos durante un período de tiempo más largo sin la necesidad de múltiples cargas de batería.
La expectativa es que la carga inalámbrica se mejore aún más y pueda ayudar en las actividades de los sectores que ya utilizan esta tecnología o que pretenden implementarla en su vida diaria.
Un buen ejemplo de ello es la carga inalámbrica de coches eléctricos en movimiento, cuyo avance ya está en fase de pruebas y resolvería la demanda de más practicidad en la carga del vehículo en menos tiempo.
Este tema de la carga inalámbrica a distancia se ha visto como una evolución natural de la tecnología, ya que sería factible mantener un dispositivo cargándose en cualquier lugar con una distancia mínima a la estación de carga.
Usando el ejemplo práctico del teléfono celular, existiría la posibilidad de cargarlo mientras aún lo estás usando, permitiéndote realizar tus tareas con la velocidad y agilidad que son tan esenciales en nuestro tiempo.
Además, lo que se espera es la posibilidad de cargar de forma inalámbrica más dispositivos electrónicos a la vez y conectados a la misma estación de carga.
Cada vez usamos más dispositivos electrónicos para hacer nuestras tareas, por lo que es cuestión de tiempo que estén cargados de forma inalámbrica y juntos en horarios más convenientes, como por la noche, optimizando mucho el tiempo.
Finalmente, los temas laborales tienden a evolucionar con la mejora de la tecnología de carga inalámbrica, donde los dispositivos electrónicos ya forman parte del entorno corporativo.
Una gran transformación sería la carga inalámbrica de computadoras portátiles y otros dispositivos que las personas usan para realizar su trabajo, lo que provocaría interrupciones no deseadas debido a la batería baja.
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